En cualquier edificio de viviendas de más de 20 años o insuficientemente aislado, los expertos aconsejan una rehabilitación. Si la vivienda fue construida antes de 1980 posiblemente no tenga ninguna protección térmica. Con este tipo de rehabilitación podría conseguirse un ahorro del 50% de la energía consumida en calefacción y refrigeración. Y es que se reducen las pérdidas de calor y frío dentro de la vivienda y, por tanto, la energía necesaria para enfriar o calentar las habitaciones será menor.
También se reducirán las emisiones de CO2 a la atmósfera, se eliminarán las humedades interiores que suelen llevar a la aparición de moho y disminuirá el ruido procedente del exterior y de los propios vecinos. Argumentos que aportan valor añadido a la hora de vender o alquilar la vivienda.
"Si hay que rehabilitar el edificio, hágalo con criterios energéticos", dicen en el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (Idae), que junto a la Asociación Nacional de Industriales deMateriales Aislantes (Andima), tiene una guía práctica sobre la rehabilitación energética de los edificios.
Aunque el motivo que haya originado una reforma no sea el de mejorar el aislamiento térmico, con un pequeño esfuerzo adicional se puede acometer la rehabilitación térmica del edificio, recoge la guía. En una reforma, la mayor parte de los costes proceden de la mano de obra y del montaje de andamios, y no tanto de la mejora del aislamiento.
Una rehabilitación media, considerando el coste total de la obra y del aislamiento, se puede amortizar en el plazo de cinco a siete años. Teniendo en cuenta la vida del aislamiento, se podrá ahorrar en ese periodo de ocho a nueve veces más lo que costó toda la rehabilitación.
La vida útil del aislamiento es la misma que la del edificio; otra cosa es que el aislamiento pierda eficacia al cabo de 10 o 15 años porque se ha mojado debido a una condensación intersticial. Por ejemplo, cuando la comunidad de vecinos se decida a reparar las goteras y humedades, los propietarios pueden aprovechar para encargar la rehabilitación térmica de la cubierta y su aislamiento. Y si se trata de un lavado de cara, es momento de acometer el aislamiento de las fachadas.
La sustitución de las ventanas es el mejor momento para colocar unas de vidrio aislante (doble acristalamiento) y marcos con rotura de puente térmico, aconsejan en el Idae. En el 90% de los casos, las pérdidas energéticas están en la carpintería.
En las obras de fontanería hay que aprovechar el cambio de tuberías de agua caliente de la vivienda para aislarlas correctamente.
Las soluciones de aislamiento pueden realizarse tanto por la parte interior como por la parte exterior del edificio o por inyección en los muros.
Y no sólo en la finca los vecinos pueden hacer cosas. Para pequeñas reformas en el interior de la vivienda también: cuando se cambie el pavimento hay que tener en cuenta el enfoque energético además del puramente decorativo; incluir aislamiento térmico cuando se haga obra en techos, paredes y suelos, etcétera.
El Plan de Acción de Ahorro y Eficiencia Energética 2008-2012 incluye subvenciones para mejorar el aislamiento, siendo los gobiernos de las comunidades autónomas los encargados de su gestión.
Pasos a seguir
-Contactar con el especialista. Se trata de una empresa constructora o de un técnico (arquitecto, aparejador, ingeniero...) que ofrece una solución completa y asesora sobre la viabilidad de la solución propuesta, su eficacia, alternativas posibles.
-También efectúa una estimación de los ahorros obtenidos, etcétera. Es conveniente consultar a dos o tres compañías comomínimo. Le deben presentar un presupuesto con anteproyecto de la solución requerida.
-Consulte y asegúrese de que la oferta incluye la intervención de especialistas para cada acción que así lo requiera.
-Para la financiación, es muy posible que exista un programa de ayudas en la comunidad autónoma de que se trata para proyectos de ahorro de energía. Estos programas se convocan anualmente, con periodos de vigencia muy cortos, por ello es importante estar informado.
"Si hay que rehabilitar el edificio, hágalo con criterios energéticos", dicen en el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (Idae), que junto a la Asociación Nacional de Industriales deMateriales Aislantes (Andima), tiene una guía práctica sobre la rehabilitación energética de los edificios.
Aunque el motivo que haya originado una reforma no sea el de mejorar el aislamiento térmico, con un pequeño esfuerzo adicional se puede acometer la rehabilitación térmica del edificio, recoge la guía. En una reforma, la mayor parte de los costes proceden de la mano de obra y del montaje de andamios, y no tanto de la mejora del aislamiento.
Una rehabilitación media, considerando el coste total de la obra y del aislamiento, se puede amortizar en el plazo de cinco a siete años. Teniendo en cuenta la vida del aislamiento, se podrá ahorrar en ese periodo de ocho a nueve veces más lo que costó toda la rehabilitación.
La vida útil del aislamiento es la misma que la del edificio; otra cosa es que el aislamiento pierda eficacia al cabo de 10 o 15 años porque se ha mojado debido a una condensación intersticial. Por ejemplo, cuando la comunidad de vecinos se decida a reparar las goteras y humedades, los propietarios pueden aprovechar para encargar la rehabilitación térmica de la cubierta y su aislamiento. Y si se trata de un lavado de cara, es momento de acometer el aislamiento de las fachadas.
La sustitución de las ventanas es el mejor momento para colocar unas de vidrio aislante (doble acristalamiento) y marcos con rotura de puente térmico, aconsejan en el Idae. En el 90% de los casos, las pérdidas energéticas están en la carpintería.
En las obras de fontanería hay que aprovechar el cambio de tuberías de agua caliente de la vivienda para aislarlas correctamente.
Las soluciones de aislamiento pueden realizarse tanto por la parte interior como por la parte exterior del edificio o por inyección en los muros.
Y no sólo en la finca los vecinos pueden hacer cosas. Para pequeñas reformas en el interior de la vivienda también: cuando se cambie el pavimento hay que tener en cuenta el enfoque energético además del puramente decorativo; incluir aislamiento térmico cuando se haga obra en techos, paredes y suelos, etcétera.
El Plan de Acción de Ahorro y Eficiencia Energética 2008-2012 incluye subvenciones para mejorar el aislamiento, siendo los gobiernos de las comunidades autónomas los encargados de su gestión.
Pasos a seguir
-Contactar con el especialista. Se trata de una empresa constructora o de un técnico (arquitecto, aparejador, ingeniero...) que ofrece una solución completa y asesora sobre la viabilidad de la solución propuesta, su eficacia, alternativas posibles.
-También efectúa una estimación de los ahorros obtenidos, etcétera. Es conveniente consultar a dos o tres compañías comomínimo. Le deben presentar un presupuesto con anteproyecto de la solución requerida.
-Consulte y asegúrese de que la oferta incluye la intervención de especialistas para cada acción que así lo requiera.
-Para la financiación, es muy posible que exista un programa de ayudas en la comunidad autónoma de que se trata para proyectos de ahorro de energía. Estos programas se convocan anualmente, con periodos de vigencia muy cortos, por ello es importante estar informado.
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